
Mármol
6 x 16 x 16cm
Peral hace evidente el poder de la representación que afecta lo real. A pesar de volverse más abstracta, y de haber perdido la forma humana que caracterizó sus primeras piezas a lo largo de su trayectoria, su escultura sigue manteniendo un principio de figuración, una vinculación representativa con el hombre, con lo humano. Se compone de fragmentos, que separados de su estructura original buscan una recomposición o un significado en su identidad fragmentada.
No son piezas que una vez asociadas puedan llegar a crear una estructura, el fragmento es algo roto, separado, disociado, perdido, volver a activar su significado puede llegar a ser una tarea imposible, pero ligado a otros fragmentos puede lograr crear asociaciones, reconocer lo que fue, o sentir al menos, el vago recuerdo de lo que se nos escapa.